Los Ángeles, EU.- En un principio parecía que el romance de Chris Pratt con la hija mayor de Arnold Schwarzenegger y Maria Shriver, que trascendió a raíz de las fotografías que los paparazzi habían sacado a la pareja a lo largo del verano, no era nada serio debido en gran parte a que el actor acababa de anunciar su separación de Anna Faris a principios de este mismo año, pero el paso del tiempo ha demostrado que lo suyo era algo más que un idilio pasajero.
Esa muestra de afecto cobra aún más importancia si se tiene en cuenta la política de silencio que Chris ha impuesto en torno a su noviazgo, negándose a hablar de su pareja en sus entrevistas y apariciones públicas.
Deja un comentario