“Chico”, un perrito que un día y sin querer se perdió por las calles de Odessa, Texas. Como si ya supiera lo que tenía que hacer y dónde ir, el can se acercó hacia la estación de policía más cercana, para sorpresa de todos los agentes policiales que se encontraban en el lugar. Y no, no se quedó afuera esperando a que su amo o quien fuera lo recogiera, sino que se metió hasta las oficinas y se acercó hasta los oficiales para pedir ayuda.

Así como los humanos, “Chico” puso gentilmente sus patitas peludas en el mostrador y se quedó mirando a los policías que estaban ahí. Por supuesto que la gente dentro del edificio comenzó a buscar a su dueño aunque no dieron con él. De acuerdo con Bored Panda, entre los oficiales que recibieron a “Chico” estaba el sargento Rusty Martin, y dijo que el perrito no parecía preocupado por estar perdido sino todo lo contrario, era como si hubiera salido a dar un paseo y decidiera hacer una visita a los amables oficiales para alegrarles el día.

Los oficiales decidieron que mientras daban con el dueño de “Chico” y aprovechando que por ahí tenían una pelota de tenis, se pusieron a jugar con él y le dieron todo el cariño que necesitaba en ese momento. Cuando el tiempo de juego terminó, era tiempo de que los policías se aseguraran de que regresara sano y salvo hasta su hogar, pero esa no iba a ser una tarea tan sencilla porque la tarjeta de identificación en su collar se había caído así que le pidieron a control de animales del estado buscar un microchip en su dentadura.

Sin embargo, “Chico” sintió que su tiempo en la policía había terminado y se escabulló rápidamente antes de que llegara el control de animales. Afortunadamente, se dirigió directo y sin escalas hasta su familia, que lo reportó al día siguiente. Según el Sargento Rusty, los dueños del perrito llamaron para decir que había regresado al otro día y que no había nada de qué preocuparse pues vive muy cerca de las oficinas de la policía.